El Tambito: obra de conservación y restauración

El Tambito: obra de conservación y restauración
Comenzaron las obras de conservación y restauración integral del «Tambito», un pequeño chalé de arquitectura inglesa, ubicado en Av. Berro 3900, Plaza Sicilia, Parque 3 de Febrero en el barrio de Palermo, que comenzó su vida como lactario, más tarde fue reducto tanguero, luego fue sede de la administración del Parque Tres de Febrero y de la Casa de la Juventud, más tarde fue la Casa Joven, hasta quedar abandonado a su suerte desde 2005. #ElTambito 

 

El Tambito, «un histórico reducto tanguero» de 145 años de antigüedad,  comenzó a ser restaurado por el Ministerio de Espacio Público e Higiene Urbana de la ciudad de Buenos Aires, realizando la puesta en valor del edificio. Esta tarea se inició en noviembre/22 y se calcula que finalizará a mediados de este año.

La restauración de “El Tambito” es una obra que «contempla la recuperación del edificio en su totalidad, desde sus aspectos tangibles como intangibles, conservando todo cuanto sea posible de sus componentes originales. Las tareas se basan en la conservación integral exterior e interior, completando y restaurando sus elementos existentes, revirtiendo la causa de los daños y estabilizando la obra. Considerando también que el edificio, tiene muchos años en desuso, y que también ha sufrido incendios en distintas ocasiones, deberá ser liberado de elementos que alteren o desnaturalicen su imagen, recomponiendo sus cubiertas y poder así recuperar sus valores auténticos«.

El edificio estaba destruido. En la década del 40, funcionaba allí la administración del Parque Tres de Febrero y de la Casa de la Juventud.  Luego la Casa Joven, entre 2001 y 2005, momento en que fue abandonada. 

El Tambito, también llamado el Kiosquito, conformaba junto con lo de Hansen un tradicional circuito de tango del Buenos Aires de fines del XIX y principios del XX, un escenario donde la música, el baile, pero también de malevos y compadritos.

Según informa La Nación en su nota del 5/1/23 (El Tambito: la Ciudad recupera un histórico reducto tanguero en Palermo) «Al menos por ahora, según pudo averiguar LA NACIONel centenario edificio no tiene un destino previsto. En algún momento hubo intenciones de transformarlo en un bar – cuando una ley porteña de 2014 impulsaba la construcción de confiterías en todas las plazas de más de 50.000 metros cuadrados de superficie – en un museo del tango y hasta en un espacio cultural perteneciente a la comunidad LGBT (lesbianas, gays, bisexuales y transexuales), pero ninguno de los proyectos avanzó.» En la misma nota muestra esta imagen de la obra terminada.

Foto publicada en La Nación, nota del 5/1/23 El Tambito: la Ciudad recupera un histórico reducto tanguero en Palermo
Foto publicada en La Nación, nota del 5/1/23 El Tambito: la Ciudad recupera un histórico reducto tanguero en Palermo. El gobierno porteño comenzó la puesta en valor del particular edificio, que está a metros del Jardín Japonés; tras varios años de abandono, el techo del edificio estaba en mal estado, al igual que la fachada exterior

Memoria descriptiva “El Tambito”

fuente ESPECIFICACIONES TÉCNICAS PARTICULARES OBRA: CONSERVACIÓN Y RESTAURACIÓN INTEGRAL “EL TAMBITO” 

Se trata de un edificio catalogado por el Gobierno de la Ciudad, con protección “Estructural”, el mismo está ubicado dentro del Área de Protección Histórica APH2. Es una obra de relevancia patrimonial, portadora también de valores simbólicos presentes en la memoria colectiva del lugar. En sus inicios funcionaba como lactario de allí toma su nombre: “El Tambito”, por el expendio de leche “a pie de vaca”, y posteriormente se resignificó como un lugar de bailes y tangos, dentro de la recorrida tradicional de los tangueros junto con el Velódromo y el café de Hansen. Su fecha estimada de construcción 1877 y se atribuye la construcción del edificio al arquitecto Thays. Su estilo responde a la corriente pintoresquista, y además posee otras valoraciones como las urbanísticas por agrupamiento en el conjunto con otros edificios del Parque 3 de Febrero; arquitectónica por su tipología y la singularidad de su construcción y diseño. 

Hacia 1891 Carlos Thays el arquitecto paisajista, amplió, diseñó y remodeló el Parque 3 de Febrero, como Director de Paseos en aquella época. Con la visión de Alphand, con quien había estudiado, sobre la París que sirvió de inspiración. Los espacios públicos eran los ámbitos de salubridad e higiene para descomprimir el gran crecimiento de la ciudad. La arquitectura con reminiscencia inglesa que existía en los parques estuvo inspirada en la corriente pintoresquista, en la tradición de las casas de campo, y fue un fuerte vínculo con la naturaleza, donde ésta se presenta idealizada. Contrariamente a esto, no son espacios para ser vividos plenamente o practicar deportes sino más bien espacios concebidos de exquisito tratamiento destinados a la contemplación. Si bien la corriente estilística pintoresquista se asocia a una cierta informalidad en el modo de vida, ésta tenía vigencia en la edificación doméstica y su introducción en el diseño urbano fue concretada por Thays. Dentro del sector del Rosedal, se diseñan una serie de obras de ornamentación mediante el uso de puentes, glorietas, belvederes, y al mismo tiempo, se incorporan ciertos equipamientos como los baños públicos y la administración. Los edificios y entorno del mencionado Rosedal como así también el edificio ex Sanidad Vegetal fueron puestos en valor y en uso, con obras que reflejan la corriente estilística que alternan morfológicamente con volúmenes simples entre carpinterías y estructuras de madera, pain de bois, y techos de cubiertas con tejas como rasgos característicos del pintoresquismo.

El edificio “El Tambito” está conformado por un hall central de mayor altura dentro de un cuerpo octogonal, las cubiertas a dos aguas son de tejas, con estructura y cenefas de maderas ornamentales. El cuerpo central está facetado, remata con una serie de pequeños techos también a dos aguas bajo los que se destacan ventanas de tipo “cuadrilóbulos” de madera completando las carpinterías.

Cuenta Ricardo Ostuni en el blog Baires Historia que «Contemporáneo del Hansen era El Tambito o El Kiosquito (llamado indistintamente) cuyo arrendatario era don Vicente L. Casares. Su origen se remonta a 1877 cuando el 1 de octubre se firmó el convenio entre la Comisión Auxiliar del Parque Tres de Febrero y el señor Casares que se comprometía a pagar un alquiler mensual de cuatrocientos pesos moneda nacional por cinco años. 

El 31 de agosto de 1888 aparece la firma Constan Fernán y Cia. pidiendo arrendar el llamado Kiosco Casares, lo que hace presumir que durante el primer año funcionó sólo como tambo y luego fue desocupado. Funcionaba en un chalecito en la Avenida Casares, que aún perdura con algunas reformas, y que fuera hasta no hace mucho asiento de la Secretaría de la Juventud del Gobierno de la Ciudad. Roberto Firpo solía recordar también a un arrendatario al que llamaba don Juan y sostenía que Ernesto Ponzio (El pibe Ernesto) había bautizado de tal modo su famoso tango en homenaje al arrendatario del Kiosquito o Tambito. Hacia 1890 actuaban Eusebio Azpiazú, el cieguito, en guitarra, Pascual Romero, Vicente Pesce y el tano Roque.

En el Tambito ocurrió un grave hecho de sangre: en una pelea de patotas entre niños bien y malevos, fue muerto de una puñalada el joven Juan Carlos “Vidalita” Argerich de la alta sociedad porteña; el matador fue José “Cielito” Traverso, uno de los dueños del Café O´Rondeman del Abasto donde cantaba y paraba Gardel, quienes además eran lo que hoy llamaríamos punteros políticos de don Benito Villanueva».

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