La justicia impide asfaltar el empedrado en el barrio de Palermo

La Justicia hizo lugar al pedido de los vecinos ordenando la proteción del adoquinado histórico de todo el barrio de Palermo.

A través de una medida cautelar, la Justicia ordenó al gobierno porteño que no se avance con la pavimentación sobre los adoquinados existentes en el barrio de Palermo. La disposición prohíbe colocar una capa asfáltica por encima del adoquinado y obliga al gobierno de la ciudad a informar, en cinco días, sobre las medidas para conservar los adoquines ya extraídos en la calle Nicaragua entre Aráoz y Armenia, así como el lugar en el que serán depositados.

La Justicia resolvió también que, en obras futuras, el gobierno de la ciudad deberá presentar informes sobre la conservación del empedrado en un plazo de tres días a partir de la ejecución de cualquier obra.

La jueza Cecilia Mónica Lourido hizo así lugar, el 31 de mayo, y de manera parcial, al pedido de una medida cautelar interpuesta por vecinos del barrio de Palermo y la Comuna 14, con el acompañamiento de la Unidad Especial de Patrimonio Histórico Urbano de la Defensoría General de la Ciudad.

Entre los argumentos del pedido, los vecinos y la Defensoría General sostienen que las obras violan lo dispuesto en la ley 65, que obliga al gobierno de la ciudad a mantener y reparar las calles con empedrado o adoquinado con materiales originales. Además de razones históricas, aducen intereses ambientales: el adoquinado permitiría, según ellos, una mejor absorción del agua de lluvia.

Daniela Proietti, directora de la Unidad Especial de Patrimonio Histórico Urbano de la Defensoría General de la Ciudad, remarca la importancia de la orden judicial. «El ritmo de las obras se maneja con una rapidez bastante importante: en una noche sacan los adoquines y al día siguiente ya se pavimenta la calle. Por eso se pidió una cautelar, para que se paralicen de inmediato las obras y se informe el motivo y se repongan las piezas», explicó a LA NACION.

Según fuentes oficiales del Ministerio de Espacio Público, «el 21% de las calles y avenidas de la ciudad son de adoquines, y hay un alto porcentaje de arterias adoquinadas parcialmente recubiertas con asfalto».
Afirman que hoy, en Palermo «se trabaja en Soler entre Coronel Díaz y Scalabrini Ortiz, donde sólo las cunetas son de granito y las calles son de asfalto». Sin embargo, no pudieron precisar si las cunetas serán respetadas o no.