Privatización del Autódromo, de El Dorrego e instalación de bares privados en espacios públicos

Pese al cambio de discurso que realizó el jefe de gobierno porteño, ahora apunta a más privatizaciones, como para no perder el ritmo de sus últimos 8 años en el cargo. Las 166 hectáreas del Autódromo de Bs. As, concesiones de bares privados por cinco años en los parques sin que deban ser aprobados por la legislatura y la venta en subasta pública parte del Predio Ferial El Dorrego.

En el Autódromo, se elegió la figura de un fideicomiso compartido con inversores privados, los que deberán aportar los fondos para la puesta en valor de las instalaciones y la construcción de un cónclave fierrero-comercial de nivel internacional. En retribución las empresas gozarán por 30 años (sí, leyó bien, son treinta) de «uso, goce y explotación» del negocio y a eso súmele el beneficio de exenciones impositivas. Como era de esperarse, se alzaron voces de repudio en distintos sectores de la oposición porque según dicen, el convenio tiene puntos centrales sin aclarar y no incluye ninguna compensación para el Estado ni para los vecinos de Villa Lugano. Es cierto que el Autódromo, ubicado en Roca y General Paz está deteriorado a tal punto que sólo se pueden disputar carreras de categorías menores. El predio estaba concesionado a la empresa ACBA SA pero, a raíz del deterioro de las instalaciones, debió padecer una clausura en 2014. Tiempo antes, Macri tuvo que negar las versiones de la intención de demoler para instalar en ese lugar una planta de tratamiento de basura. El proyecto privatizador ingresó a la Legislatura un día después del triunfo de Larreta.

Por otro lado, en el día de ayer se supo de la resolución del PRO de vender en subasta pública parte del Predio Ferial El Dorrego, en Palermo y, según se cuenta, piensa hacer lo mismo con el Buenos Aires Design. El proyecto que fue presentado el viernes pasado, se pone en venta la mitad de la sede gubernamental del Distrito Audiovisual. Según leemos en Palermonline, el artículo 1° lo dice de la siguiente manera: «Declárase innecesario para la gestión de la Ciudad de Buenos Aires una fracción de terreno identificada como Polígono a-b-c-l-m en el croquis q como anexo 7 forma parte integrante de la Ley, del predio delimitado por las calles Dorrego, Cap. Gral Ramón Freire, Concepción Arenal y Zapiola y dispónese su enajenación, aprobándose la misma de conformidad con el procedimiento de venta en subasta pública». Se puede entender claramente que el negocio inmobiliario que significan esas tierras, en ese lugar, habla de un negocio millonario para los que compran. 

En relación a los emprendimientos privados a instalar en espacios públicos, leemos que de acuerdo a la Disposición N° 77 del ministerio de Desarrollo Económico, encabezado por Francisco Cabrera, el gobierno porteño concesionará 7 espacios públicos, por 5 años, para actividades privadas, que van desde la instalación de kioscos y confiterías hasta la explotación de canchas de fútbol 5, vóley y básquet. El que sea por 5 años significa que no debe pasar por la Legislatura, hecho dudoso que alerta a la oposición sobre un posible direccionamiento de las adjudicaciones. Uno de los lugares en cuestión es el Museo de Artes Plásticas Eduardo Sívori ubicado en Avenida Infanta Isabel entre Iraola y Freyre será concesionado para que funcione un “bar confitería”. Lo mismo se quiere hacer en la ex Cervecería Munich, ubicada la avenida de los Italianos al 900. En el Planetario Galileo Galilei, ubicado en avenida Sarmiento y Belisario Roldán, pretenden concesionar otro bar privado. El Polideportivo Onega, Gabriela Mistral al 3800, es otro de los lugares que caen en la voleada, ya que se otorgará a privados la explotación comercial de canchas de futbol 5 y canchas de fútbol 7. Por otro lado, en el Polideportivo Colegiales de Freire al 200, se instalarían canchas de fútbol, vóley y básquet. Y, para terminar, debajo de la autopista 25 de Mayo, Pedernera N°950, José María N°953 y Riglos N°920, se concesionarán la explotación de «complejos deportivos».

Parece que Mauricio Macri quiere dejar todo privatizadísimo antes de su partida. Veremos qué nos deparan las noticias de los próximos días.