Se trató en Audiencia Pública el nuevo Código de Edificación

Se trató en Audiencia Pública el nuevo Código de Edificación
Este lunes se llevó a cabo la primera parte de la Audiencia Pública que trata el nuevo Código de Edificación de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, una ley con aprobación inicial que actualiza la normativa vigente desde el año 1943, que presenta objeciones por parte de organizaciones y vecinos. Hubo más de un centenar de inscriptos. 

«Esta ley es el resultado de un proceso con modificaciones, producto de la participación de los sectores involucrados, y se complementa con los nuevos Códigos Urbanístico y de Habilitaciones» afirmó el Subsecretario de Registros de Interpretación y Catastro del Ministerio de Desarrollo Urbano y Transporte, arq. Rodrigo Cruz al abrir la ronda de funcionarios expositores. Explicó que su objeto es cómo se construye -en tanto, el del Código Urbanístico es qué se puede construir- estableciendo condiciones con independencia de dónde está ubicado el edificio.

El subsecretario destacó que «la legislación vigente desde el año 1943 es muy antigua respecto a materiales y está pensada para otra estructura social«. En este sentido señaló avances en cuanto a innovación e inclusión, «regula sobre los responsables de ejecutar las obras durante y después de ellas, establece estándares, condiciones, prestaciones que deben cumplirse con independencia del material«. Por otra parte remarcó «la sustentabilidad respecto a clima, seguridad, durabilidad y ambiente que incluye novedades respecto al consumo de agua y energía«. 

Finalmente subrayó el mayor nivel de responsabilidad en la conservación de edificios y la categorización de los trámites que serán más ágiles, sencillos y transparentes.

A continuación, la directora general de Interpretación Urbanística del Ministerio de Desarrollo Urbano, arq. Verónica Cópola, comenzó ponderando «el trabajo participativo comenzado en el año 2016 para cambiar una ley [la de 1943] que coarta la creatividad de los profesionales«. Entre los aspectos más innovadores mencionó un proceso administrativo con digitalización y clasificación de trámites según la complejidad de la obra y que guía y orienta la estética urbana por ejemplo en fachadas, donde no se podrán exponer aires acondicionados y en el tratamiento de los muros divisorios que deberán ser acordes con aquellas.

Además, remarcó que «se incorpora la perspectiva de género en los baños con cambiadores obligatorios de bebés, baño familiar que incluirán a niños y que la bañera y los bidets en adelante no serán obligatorios«. «La seguridad -afirmó Cópola- es según el riesgo, de modo que las salidas de escaleras, rampas y puertas, tendrán nuevos anchos y señalética«. También apuntó actualizaciones en usos promoviéndose los techos y fachadas verdes.

En representación de la Defensoría del Pueblo de la Ciudada, el director de coordinación operativa de planeamiento, obra y espacio público, Fernando Claudio Fimognare, dejó propuestas para facilitar la accesibilidad y establecer incentivos a cuidados ambientales.

En tanto, la integrante de la Junta Comunal N° 13, Julieta Costa Díaz, sostuvo que «este proyecto arruinará la calidad de vida de la población porque plantea un retroceso en materia de accesibilidad y destruye el patrimonio» a la vez criticó «la falta de participación de los vecinos en su elaboración porque fue escrito con los grandes desarrolladores inmobiliarios, el mercado, y se corrió al Estado«.

Más de un centenar de inscriptos

Las principales objeciones efectuadas al nuevo Código fueron que «baja el tamaño mínimo de las viviendas, de casi 29 metros a 18 metros cuadrados más baño, lo que implica una reducción del 30% y un aumento de la capacidad constructiva en donde uno de cada siete habitantes no tiene garantizado el piso mínimo de habitabilidad«, según el Observatorio del derecho a la Ciudad. Además, hubo reclamos coincidentes en cuanto a que las normas técnicas deben ser discutidas y «se flexibilizan y desvirtúa a los inmuebles patrimoniales«.

Se aludieron a retrocesos comparativos con la normativa vigente a nivel internacional, que se establecen prescripciones que limitan la labor profesional y no se regula el control de las obras así como tampoco las ampliaciones. 

Hubo propuestas de inclusión. Algunos especialistas, entre ellos de la Cámara Argentina de Seguridad, observaron disidencias respecto a la categorización de los edificios y propusieron incorporar el cuadro de protección contra incendios y la clasificación de actividad según el riesgo así como que la vigencia sea a partir de la verificación técnica. También hubo coincidencias en que se constituya una Comisión Técnica Permanente de expertos que contribuya a la mejor aplicación normativa. 

Entre los oradores incriptos, que para la jornada de hoy alcanzaron el número de 137, hubo arquitectos, abogados, representantes de ONGs, organizaciones barriales y vecinos. Las principales inquietudes giraron en torno a la forma en la que están redactados algunos artículos del nuevo código que tiene algunas diferencias con el urbanístico, que también está siendo tratado en Audiencia Pública.

Algunos de los oradores alertaron sobre «zonas grises» como por ejemplo la responsabilidad sobre las veredas y sobre las nuevas zonas edificables que, según anticiparon los vecinos, beneficiará al negocio inmobiliario y le quitará identidad a algunos barrios porteños. Hubo asimismo quienes reclamaron que se revea la obligatoriedad de la construcción de porterías en los edificios. 

Por su parte, organizaciones que agrupan a personas con movilidad reducida como Rumbos, APEBI o REDI, tuvieron su espacio para manifestar sus quejas acerca de las obligaciones de accesibilidad vigentes, que temen que podrían quedar afuera en el nuevo código. Pidieron por especificaciones claras para rampas y ascensores, así como también advirtieron que serán excluidos del seguimiento de la aplicación de estas normas. Elaboraron un documento de consenso que fue entregado a la Comisión.

La Audiencia Pública que tuvo lugar en el salón San Martín, situado en el piso principal de la sede parlamentaria, comenzó minutos después de las 13:00 y concluyó poco antes de las 19:00. Fue presidida por la diputada que encabeza la Comisión asesora de Planeamiento Urbano, Victoria Roldán Méndez (VJ), quien estuvo secundada por sus pares Maximiliano SahoneroJian Ping YuanDaniel Presti, Cristina García, Agustín Forchieri, Claudio Romero, Carolina Estebarena, Gastón Blanchetierre, Guillermo González Heredia, María Luisa González Estevarena, Paula Villalba, Eduardo Petrini y Ariel Álvarez Palma (VJ); y Javier Andrade (UC). El desarrollo fue cubierto con el servicio de intérpretes de lengua de señas y aro magnético para hipoacúsicos.

Estructura de la normativa propuesta

El proyecto de nuevo Código de Edificación está divido en 5 Títulos que establecen condiciones y estándares a lo largo del proceso de las obras:

Título Primero: los objetivos, alcances del marco normativo y las generalidades del código.

Título Segundo: se definen condiciones para los procedimientos administrativos referidos al proceso de obra, haciendo hincapié en la razonabilidad y eficiencia de los controles del proceso. La simplificación, agilización y transparencia son los vectores ordenadores de los criterios de clasificación de los permisos. Se categorizan los distintos tipos de permiso a los efectos de establecer diferentes tipos de tramitación. La responsabilidad de los sujetos intervinientes, su identificación y registro son aspectos de especial importancia. Se clarifican los alcances de cada uno y se crea el registro de empresas constructoras.

Título Tercero: engloba a todas las condiciones y prestaciones referidas al proyecto. Se define el marco regulatorio que establece los parámetros que deben cumplir los edificios en relación a la estética urbana, a la habitabilidad, salubridad, a la accesibilidad, a la seguridad y a la sustentabilidad.

La nueva normativa establece:
– pautas en materia de estética urbana la cual amerita la tutela estatal, considerando la preservación patrimonial por medio de la definición de los criterios de actuación y diversos grados de intervención.
– nuevas condiciones para la distribución de la superficie de las viviendas, con las mismas prestaciones en términos de habitabilidad, ventilación e iluminación, teniendo como consecuencia la mejora de su funcionalidad y un mayor acceso a la vivienda.
– nuevos parámetros para garantizar mejoras en la habitabilidad, la accesibilidad y la salubridad, incluyendo políticas de género, actualizando la clasificación de los usos.
– nuevas prestaciones relativas a la prevención y protección contra incendios, teniendo en consideración los tipos de locales y usos.
– la implementación del diseño sustentable, estableciendo soluciones ambientales y requisitos mínimos que deberán ser respetados, como la gestión de residuos en obra, entre otros.
– respecto de las estructuras se incorporan nuevos estándares de calidad para el cálculo y seguridad de las construcciones. En lo relativo a materiales, sistemas constructivos e instalaciones, se incorporan nuevos estándares de calidad a fin de poder incluir nuevos materiales que hoy cumplan dichos estándares.

Título Cuarto: refiere al proceso en la etapa de la ejecución de las obras, su seguridad y los controles.

Título Quinto: establece nuevos requerimientos vinculados a la conservación y mantenimiento de los edificios luego de finalizadas las obras en el entendimiento de que las obras deben ser eficientes no sólo en el momento de su construcción sino a lo largo de toda su vida útil.

Mañana, la segunda parte

La segunda y última parte de la Audiencia Pública que comenzó hoy continuará mañana, en el mismo lugar, a partir de las 13 horas. Hay 138 oradores en el listado de inscriptos.