Por segundo año consecutivo, la CNB y el Instituto Nacional del Teatro presentan este ciclo de espectáculos para disfrutar en el patio de la Casa Nacional del Bicentenario. Tres obras teatrales provenientes de Provincia de Buenos Aires y de CABA, que realizarán funciones al aire libre, a la hora de la caída del sol. El ingreso se realizará por orden de llegada. #CNB #CasaNacionaldelBicentenario
El patio de la Casa Nacional del Bicentenario, ubicada en Riobamba 985, será el escenario de un ciclo de espectáculos que presenta a 3 obras teatrales provenientes de Provincia de Buenos Aires y de CABA.
Las funciones se llevarán adelante al aire libre los sábado 25 de febrero y viernes 3 y 10 de marzo a las 19. El ingreso se realizará por orden de llegada.
PROGRAMACIÓN
Sábado 25 de febrero
INESTABLE DE SUTOTTOS
Este espectáculo del dúo Sutottos toma como eje el miedo y sus derivados; paranoias, fobias, obsesiones y ansiedades. Una puerta mal cerrada o la humedad en una pared son puntos de partida que conducen a la neurosis y que terminan atrapándonos en nuestros propios temores. Inestable es una sucesión de estados de ánimo que nos hace confundir los límites entre lo real y lo irreal.
Ficha artística
Dramaturgia: Andrés Caminos, Gadiel Sztryk
Actúan: Andrés Caminos, Gadiel Sztryk
Dirección: Andrés Caminos, Gadiel Sztryk
Viernes 3 de marzo
UNA
UNA es una voz que cuenta. El pretexto es una banal observación que viene de afuera: la constatación de un detalle físico de por sí insignificante que se transforma en un evento único y perturbador para analizar las dudas de la existencia.
¿Quién soy? ¿Quiénes somos? ¿Cómo nos ven los demás? ¿Cómo los veo? ¿Cuántos personajes somos? Abandonar las cien mil máscaras para ponerse UNA. Pero la transformación esconde un riesgo: en la búsqueda del uno nos descubrimos ninguno.
Ficha artística
Dramaturgia: Giampaolo Samá
Actúan: Miriam Odorico
Vestuario: Julio Suárez
Diseño de luces: Giampaolo Samá
Diseño gráfico: Paola Bilancieri
Producción: Vagón Producciones
Dirección: Giampaolo Samá
Viernes 10 de marzo
LO ÚNICO ÉPICO AQUÍ LO HEMOS ROBADO
«Cuando sea grande quiero comprar esa empresa de ladrillos de plástico, para construir universos que floten en el fin del mundo«. Es una obra episódica que intenta desentrañar la idea de un posible fin del mundo desde una dramaturgia poética y la construcción de imágenes mediante el uso de objetos particulares.
Ficha artística
Intérpretes: Matías Milanese y Pamela Pérez Adomaitis
Asistentes de escena: Federico Pezet y Paula Sanabria
Producción: Santiago Tezza – Los Pipis Teatro
Dramaturgia y dirección: Federico Lehmann
CUÁNDO
Hasta el 10 Marzo 2023
HORARIO
Sábado 19:00 a 21:00
Feriados 19:00 a 21:00
ENTRADA
Casa Nacional del Bicentenario
Es un espacio cultural destinado a la producción artística contemporánea.
La Casa
La Casa Nacional del Bicentenario fue inaugurada en 2010 como un espacio dedicado a la historia argentina. Durante sus primeros seis años, diversas exposiciones dieron cuenta de aspectos relevantes en los dos siglos transcurridos desde la Independencia. Las muestras se concentraban en un tema, persona o aspecto específico para desplegar un guión expositivo en el que confluían la historia y el arte argentino. A su vez, se realizaron numerosos ciclos de música, teatro, danza y cine, además de instancias de formación y talleres abiertos a la comunidad, charlas, presentaciones de libros, y visitas guiadas para escuelas y público en general. Pensada, planificada y desarrollada como un espacio cultural dinámico, abierto, plural y federal, la CNB tuvo como objetivo principal recuperar y celebrar la identidad nacional a través de la reflexión sobre el pasado como herramienta para pensar el presente, y fortalecer el futuro. En la segunda etapa (2016-2019), se llevó a cabo un viraje del proyecto hacia una propuesta expositiva más ligada al arte contemporáneo argentino, logrando destacarse como uno de los más importantes espacios de arte contemporáneo del país.
La CNB depende de la Dirección Nacional de Museos (Secretaría de Patrimonio Cultural, Ministerio de Cultura de la Nación). A diferencia de la mayoría de los museos nacionales, no posee una colección propia, por lo que construye una identidad más plástica y heterogénea. El edificio en el que está emplazada es el resultado de la remodelación y puesta en valor de dos inmuebles de 1913, llevadas adelante con el objetivo de conservar y valorizar la arquitectura original, y de generar espacios e instalaciones acordes a las necesidades específicas de cada exposición. Así, ya desde su estructura formal, la Casa Nacional del Bicentenario materializó lo que sería su impronta: una fachada de comienzo del Siglo XX y un interior de salas que mutan, cambian, se transforman y se acomodan a los requerimientos del arte del Siglo XXI. Pasado, presente y futuro en un solo lugar.
Hoy, la Casa se constituye como un centro cultural dedicado al arte y al pensamiento. Ofrece a sus públicos distintas propuestas culturales, tales como exposiciones, funciones de teatro, cine y danza, recitales, talleres, conversatorios, presentaciones de libros y visitas guiadas. También hay actividades especialmente pensadas para las infancias, y se promueven enfoques accesibles con perspectiva de género y diversidades. En este sentido, la Casa se piensa a sí misma como un espacio plural y contemporáneo, que fomenta la reflexión y el intercambio acerca de los debates urgentes del tiempo presente. Visibilizar y promover discusiones actuales, que atraviesan y conforman la cultura, nos convoca sobremanera.
Desde la Casa Nacional del Bicentenario impulsamos la diversidad de propuestas culturales y la diversidad de ideas, porque creemos que la transformación de la sociedad a través de la interacción entre las artes y las palabras no solo es posible sino que es imprescindible para lograr esa Argentina más justa con la que soñamos.
El Edificio
El edificio que alberga la Casa Nacional del Bicentenario, ubicado en el número 985 de la calle Riobamba de la Ciudad de Buenos Aires, fue construido hace más de un siglo. Originalmente se trataba de dos construcciones gemelas, con departamentos destinados a la renta, propiedad de Lorenzo Ruiz Saralegui. El plano conservado de 1912 muestra que cada uno de ellos constaba de dos amplias unidades de vivienda por piso. Su estilo arquitectónico estaba inspirado en la tradición académica francesa.
En 1937, los edificios fueron adquiridos por Obras Sanitarias de la Nación para dar vivienda a empleados jerárquicos, que en su mayoría trabajaban en la administración central, ubicada en la misma manzana. El 26 de junio de 1951 se inauguró en la planta baja la Proveeduría Central, en la que los empleados de Obras Sanitarias adquirían productos y contrataban servicios asistenciales. En el acto inaugural, acompañada de autoridades y dirigentes gremiales, Eva Perón dio un discurso desde el balcón del primer piso. Desde 2006, fue adjudicado a la entonces Secretaría de Cultura de la Nación, hoy Ministerio de Cultura de la Nación.