Vecinos de Palermo y otras Comunas piden mejoras en el proyecto para el Arroyo Vega

Los Consejos Consultivos Comunales de las Comunas 11, 12, 13, 14 y 15 decidieron constituir el Inter Consejos Consultivos Comunales de la Cuenca del Arroyo Vega (ICCCCAV).

                                                    por Juan Manuel Castro
Tras las inundaciones que años atrás sacudieron a la Cuidad, vecinos participativos de varias comunas decidieron unir fuerzas para organizarse y hacer peticiones a las autoridades porteñas. 

No sólo las inundaciones son un factor de «creciente peligro para las vidas y bienes de los vecinos». También los vecinos, en un documento público, indican que en los últimos años aumentó «la impermeabilización del suelo, la disminución y pérdida de arbolado y espacios verdes, la construcción indiscriminada y el cambio climático, requieren de medidas coherentes y urgentes para disminuir la posibilidad de nuevas inundaciones». 

Luego de la concreción de las obras del Arroyo Maldonado, el desafío actual en la Ciudad es el Proyecto del Segundo Aliviador del Arroyo Vega, a realizarse con financiación del Banco Mundial. 

«Al constatarse que la información pública sobre esta obra era prácticamente nula o de muy difícil acceso, los Consejos Consultivos Comunales de las Comunas 11,12,13,14 y 15 decidieron constituir el Inter Consejos Consultivos Comunales de la Cuenca del Arroyo Vega (ICCCCAV) como un ámbito de articulación en relación a la  observación, monitoreo, intercambio y control vecinal de dicho proyecto. Se constituyó el 17 de Junio del 2014 con la finalidad de contribuir a elevar los niveles de eficiencia, eficacia, control social, impacto y transparencia de la gestión de las obras para el Arroyo Vega, mediante una intensa y sistemática participación vecinal en el acceso a la  información, en las decisiones y en el control del proyecto», expusieron los vecinos.

Según su análisis, «sosteniendo reuniones con funcionarios de la Agencia de Protección Ambiental, del Ministerio de Desarrollo Urbano y del Ministerio de Hacienda de la Ciudad, con representantes del Banco Mundial y con destacados profesionales», el ICCCCAV difundió sus conclusiones al respecto de esta obra con impacto en cinco de las 15 Comunas porteñas.

Según los integrantes del ICCCCAV «la necesidad de obras hidráulicas para disminuir significativamente el riesgo de inundaciones en la cuenca es indiscutible. En ese sentido consideramos que el proyecto del segundo aliviador del Arroyo Vega es importante para reducir la peligrosidad de las inundaciones». 

De todos modos, advierten que no logra toda la disminución del riesgo hídrico que se podría obtener para una zona de llanura con poco declive y sujeta a la concentración en corto tiempo de lluvias intensas. Es un «fenómeno que se viene registrando en los últimos años y que probablemente  se incremente en el futuro inmediato debido al cambio climático».
 
Tras el análisis de documentos y fuentes públicas, el Inter concejo dice que «para asegurar la disminución máxima del riesgo hídrico en estas condiciones geográficas y meteorológicas, el diseño actual de la obra debe complementarse con una cantidad a determinar de grandes, medianos y pequeños reservorios en la cuenca alta y media». 

En tanto, también se refirieron a los planes Emergencia y Contingencia: «Para salvaguardar la vida de la población y proteger el patrimonio colectivo de la Ciudad son una Medida No Estructural del Proyecto a la que no se le ha dado hasta la fecha la debida importancia y urgencia». Como el riesgo de inundación existe ya y puede desatarse en cualquier momento, el ICCCCAV está impulsando ante las autoridades la elaboración inmediata de los planes de Emergencia y Contingencia comunales. Porque en caso de que se produzca una nueva inundación, tanto la población de la cuenca como sus autoridades deben saber perfectamente cómo moverse y qué hacer para disminuir los daños y evitar la pérdida de vidas. 

Por último, en su comunicado público  indicaron: «Este Inter consejo ha venido alertando reiteradamente a las autoridades sobre la inconveniencia de iniciar una obra de esta envergadura sin involucrar de manera activa a la población implicada. En este sentido, considera que esta falta de acción proactiva y preventiva del Gobierno de la Ciudad y de las Juntas Comunales, viola los principios de participación y transparencia que proclama el Banco Mundial para todos los proyectos en que interviene». 

Juan Manuel Castro